¿Sonries?
Cada vez que te tengo cerca algo distorsiona las palabras que voy a decirte. Si en lugar de lo que digo dejase hablar a mi inconsciente más de una vez hubiéramos sido protagonistas de alguna historia un poco subida de tono.
¿Y porqué no me lo dices?
Pues no se trata de pudor o de tabúes entre nosotros (a estas alturas pocos deben existir). Es precaución para no caer en una especie de animalismo que me haga dudar de si realmente sentimos algo más que atracción. Aunque dicho así tampoco me convence porqué aunque lo fuese, se trataría de una atracción física y mental… Ummm, pensándolo mejor… que tengamos grandes dosis de atracción, tampoco me parece mal…
Tú y yo tenemos algo pendiente.
¿Sonríes?
Entonces... sabes de qué te hablo…